¿Por qué los 12 Apostóles?
Ellos no son anunciadores de una idea, sino testigos de una persona que vive entre nosotros. Como los Apóstoles, queremos ser testigos de la Verdad; llegar a ser un solo corazón y una sola alma, alimentadas por el deseo de “conocer” a Dios cada vez más, arraigadas en el amor y perseverando en la fracción del pan, como la primera comunidad cristiana. Cada uno de los Apóstoles tiene una particularidad, que le aporta a nuestra obra un ingrediente específico y único.
¿Por qué Santa Teresa de Lisieux?
Por su ardor misionero; por su vínculo con María, que la llevó a sentirse siempre su hija; por su entrega, oración y acompañamiento a los sacerdotes; y, por el legado que dejó en el “Camino de infancia espiritual”.